domingo, 10 de marzo de 2019

Las competencias del docente en la educación a distancia

De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística, en los últimos diez años, el número de alumnos matriculados en un ciclo de FP de Grado Medio y de Grado Superior ha aumentado por tres. Quizás la irrupción de las nuevas tecnologías y la tendencia de una población estudiantil cada vez más digital sean las causas de este aumento. No obstante, dichos datos nos reflejan la necesidad de que los docentes posean las competencias necesarias a la hora de trabajar con dicha población estudiantil ya que la tendencia muestra que dicha tendencia irá en aumento.


Para describir dichas competencias, nos apoyaremos en Urdaneta (2008), quien describe una serie de roles que los docentes deben aplicar en la educación a distancia:
  • La orientación didáctica para la comprensión y aplicación de los contenidos abordados, la administración y la ayuda de adquisición de hábitos de estudio. Debemos tener en cuenta el rol de cualquier docente aplicado en la enseñanza tradicional. Al tratarse de educación a distancia, docente es responsable de la aplicación y la impartición de contenidos al mismo tiempo que facilita los recursos necesarios para que el alumnado, poco a poco, pueda ir adquiriendo el hábito en el estudio fomentando su autonomía en el aprendizaje
  • La evaluación como seguimiento al estudiante. En este punto, adquiere especial importancia el concepto de autonomía.Fomentar la autonomía del alumnado no significa la desvinculación con el mismo sino que el alumnado, paso a paso, vaya responsabilizándose de sus tareas y de su ritmo de trabajo. El seguimiento del mismo constituye una manera de evitar esa desvinculación además de fomentar el compromiso que el alumnado debe adquirir para la realización de sus tareas.
  • El soporte motivacional.  El abandono o la desvinculación con la formación pueden estar ligados a aspectos motivacionales. Es por ello que el docente, no solo debe dominar los contenidos que imparte sino, muy especialmente, debe constituir un apoyo motivacional al alumnado. Esta acción puede ser una aproximación al coaching que, según Pimentel Gregorio y Rodríguez García (2016), podemos definirlo como “la técnica que emplea el coach, cuya principal herramienta es la conversación, para que se produzca en el coachee una evolución que le permita alcanzar unos objetivos planteados”. La función del docente no debe ser exactamente la de un coach pero aplicando las técnicas del coaching puede servir de estímulo al alumnado como soporte motivacional y, por lo tanto, evitar la aparición de la desmotivación durante el proceso formativo.
Con ello, disponemos de una muestra acerca de las variables que cualquier docente debería disponer en el campo de la educación a distancia. En palabras de Chang (2011), “se trata de que la educación a distancia sea, verdaderamente, una enseñanza sin distancias”. Así se refleja la importancia clave que desempeñará el docente y de su necesaria figura ante el aumento de la población estudiantil en la educación a distancia. 

martes, 29 de enero de 2019

El estado actual de la Formación Profesional a distancia

La Formación Profesional constituye una alternativa para muchas personas interesadas en reciclarse profesionalmente o que les permita adquirir conocimiento y experiencia en un determinado campo profesional. Sin duda, la variedad que existe actualmente en la Formación Profesional es muy amplia, existiendo un total de 26 familias profesionales distintas. Además, la modalidad a distancia, ofrece la posibilidad de gestionar un aprendizaje autónomo, donde el individuo tiene la opción de planificar sus tiempos así como su ritmo de estudio. La combinación de ambas, constituye la temática de este post donde, gracias a los datos proporcionados por la página del Ministerio de Educación y Formación Profesional , se pueden extraer los siguientes tablas y valoraciones:

Ciclos de Formación Profesional que se imparten en cada Comunidad Autónoma en la modalidad a distancia

Familias profesionales integradas en la modalidad a distancia. De las 26 familias profesionales que existen en los ciclos de FP, hay 20 familias que sí están  integradas  en  la  modalidad  a  distancia,  es  decir,  el  76,93% de las familias tienen implantación en esta modalidad  siendo solamente 6 familias, es decir, un 23,07% del total cuyos ciclos no se imparten en dicha modalidad. Las seis familias cuyos ciclos no se imparten a distancia son:  actividades físicas y  deportivas;  artes y artesanías; industrias extractivas; marítimo-pesquera; textil  confección y piel; y vidrio y cerámica.

Familias profesionales con más ciclos a distancia. Las familias profesionales que más ciclos tiene tanto de Grado Medio como de Grado Superior en la modalidad a distancia son Sanidad (3 ciclos de Grado Medio y 7 de Grado Superior), Hostelería y Turismo (2 ciclos de Grado Medio y 5 de Grado Superior) y Agraria (4 ciclos de Grado Medio y 2 de Grado Superior).

Número de ciclos formativos. En la modalidad a distancia, se imparten un total de 29 ciclos de Grado Medio y 52 ciclos de Grado Superior.

Ciclos formativos más ofertados. Dentro de la oferta de Grado Medio en la modalidad a distancia los ciclos más ofertados son el de Atención a personas en situación de dependencia (Servicios Socioculturales y a la Comunidad) y Sistemas microinformáticos y redes (Informática y Telecomunicaciones) mientras que en el área de Grado Superior los más ofertados son el de Educación Infantil (Servicios Socioculturales y a la Comunidad), Desarrollo de aplicaciones web (Informática y Telecomunicaciones), Desarrollo de aplicaciones multiplataforma (Informática y Telecomunicaciones) y Administración y Finanzas (Administración y Gestión). 

Ciclos formativos por Comunidades Autónomas. La Comunidad Autónoma que más ciclos formativos tiene en la modalidad a distancia es la Comunidad Valenciana con 59 ciclos (22 de Grado Medio y 37 de Grado Superior) mientras que la que menos oferta tiene es La Rioja con 7 ciclos (3 de Grado Medio y 4 de Grado Superior).

Los datos mostrados nos permite tener una visión general del panorama actual de la Formación Profesional en la modalidad a distancia. Además,desde el curso 2014-2015 al 2016-2017, ha habido un incremento de un 25% de alumnado matriculado en la modalidad a distancia siendo apenas el 1% la variación en la modalidad presencial. ¿Estamos ante un nueva disrupción en nuestro sistema educativo?





martes, 31 de julio de 2018

El impacto de las nuevas tecnologías en la educación


El desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ha supuesto una innovación en el funcionamiento de diferentes áreas entre las que podemos destacar las producidas en el ámbito educativo. Su progresión ha modificado una manera diferente de adquirir conocimiento ya que el alumnado no necesita tener un profesor delante para ello sino que dispone de una serie de herramientas que le permite hacerlo, incluso, de generarlo y compartirlo. Este cambio de paradigma lo hemos podido ver en las propias aulas donde, en tan solo unos pocos años, diferentes equipos informáticos han quedado obsoletos y sustituidos por sistemas de Gestión de aprendizaje (LMS) y aulas virtuales mediante los cuales se produce un cambio en la interacción entre alumnado y profesorado en las que las variables de espacio y tiempo no están sometidas a cambios.

Debido a esta irrupción en la educación, las TIC constituyen
herramientas útiles para la adquisición y el desarrollo de las competencias anteriormente señaladas. Entre otros ejemplos podemos destacar los e-portfolios, comunidades virtuales y la nube o cloud computing donde se almacenan datos en formato digital. El aspecto común de todas estas herramientas es la posibilidad de crear y participar en nuevos entornos personales de aprendizaje que permitan al alumnado desarrollar distintas competencias clave, “al mismo tiempo que se potencia, en gran medida, la educación a distancia y virtual(Álvarez Cubero y otros,2015).



Con todo ello, el alumnado ha pasado a desempeñar un papel activo en su aprendizaje. Gracias a las TIC, los alumnos disponen de herramientas digitales para generar y adquirir información. Entre dichas herramientas podemos destacar los blogs, wikis o redes sociales los cuales les sirven como herramienta de comunicación con otros usurarios además de que les permite desarrollar otras “competencias clave como son el pensamiento crítico, la autonomía, la iniciativa, el trabajo colaborativo y la responsabilidad individual(Esteve, 2009). 

Con esta nueva situación tenemos, en la actualidad, un contexto particular. Por una parte, nos encontramos con una interacción entre profesorado y alumnado por medios telemáticos posibilitándole, a éste último, gestionar su propio ritmo de aprendizaje fomentando su autonomía. Por otro, los nuevos roles que deben desempeñar tanto profesores como alumnos donde los primeros adquieren más papel como tutor convirtiéndose el seguimiento del alumnado en un elemento transcendental durante su aprendizaje mientras que los segundos pueden desarrollar un papel más activo en sus ritmos de estudio fomentando la cultura colaborativa con otros compañeros y disponiendo de mayor accesibilidad a diferentes recursos didácticos.




miércoles, 13 de junio de 2018

El ministerio de la Formación Profesional

Con la entrada del nuevo gobierno, son muchos los cambios que se han producido en los ministerios del anterior. Uno de ellos es el que afecta al de Educación donde la nueva ministra, Isabel Celaá, ha asumido la cartera. Resulta curioso que el Ministerio de Educación lo sea, también, de Formación Profesional mostrándose, ésta, como un objetivo educativo para los próximos años. Todo ello nos hace reflexionar sobre qué papel jugará la Formación Profesional en el futuro y si, realmente, merece un protagonismo en el panorama educativo.

En primer lugar, hagamos referencia a la trayectoria de Isabel Celaá. La ministra es licenciada en Filología Inglesa, Filosofía y Derecho y catedrática de enseñanza secundaria por las Universidades de Deusto y de Valladolid. En su carrera política, ejercició el cargo de consejera de Educación, Universidades e Investigación en el gobierno del País Vasco, región que podemos considerar como una de las más avanzadas en el territorio nacional de la Formación Profesional. De hecho, hace pocas semanas, Euskadi fue sede de un Congreso Internacional sobre la Formación Profesional en el cual asistieron representantes de más de 140 países y donde uno de sus ponentes, Jorge Arévalo, impartió una charla muy interesante.

La Formación Profesional podría solventar uno de los principales problemas que tiene el país en términos de desempleo que es el paro juvenil. Los últimos datos muestran que más de un millón de jóvenes entre los 16 y los 29 años no estudian ni trabajan (los llamados ninis) además de que existe un 18% de abandono educativo siendo una cifra muy elevada si lo comparamos con la de otros países europeos. Datos que nos llevan a reflexionar sobre el papel que podría desarrollar la Formación Profesional donde existe un vínculo muy estrecho entre los centros educativos y las empresas para la formación del alumnado.


La ministra de Educación y Formación Profesional defiende la "necesidad de dar un impulso a la misma mejorando, incluso, la marca España". Entendemos, con tal afirmación, que la Formación Profesional mejoraría los datos antes mencionados y daría un impulso a nuestro sistema educativo. Además, con la Formación Profesional dual, un alumno es evaluado en la empresa donde desempeñaría las prácticas permitiéndole adquirir un mayor conocimiento en su especialidad al tener un contacto directo con la realidad. Sin duda, una posibilidad para mejorar no solo los datos del desempleo sino, también, la empleabilidad

La apuesta por la Formación Profesional supondría una clara mejora en la calidad formativa de nuestros alumnos traduciéndose en un impulso tanto a nivel social como a nivel laboral que es lo que se persigue con la modalidad dual. Se trata, por lo tanto, de tener un mayor vínculo entre las empresas y los centros educativos cumpliendo uno de los objetivos de la educación, tal y como defiende Serra Fortea, (2011) y es que "la educación tiene explícitamente el objetivo de producir un tipo de individuo que encaje con un contexto social dado".